Luna y Miranda prefieren pasar por alto el comentario de Juan (padre biológico de ambas) y su ayudante Pedro, que aparentemente saben que son adoptadas.
Gal convence a Luz para que participe en el guión de la comedia musical. Luz tiene la idea de escribir un papel protagonista masculino. Para elegirlo, los chicos van a tener que preparar un monólogo donde saquen a relucir su faceta más egocéntrica. Las chicas intentan ayudarlos, pero los chicos terminan enfadados y no quieren presentarse al casting. Diego se entera y los obliga a presentarse igualmente.
Gero, con la ayuda de Benja, quiere saber si Clara dijo algo malo de él mientras fue invisible. Gero le hace creer a Clara que otra vez se hizo invisible y le saca de mentira verdad lo que Benja le contó sobre lo que le dijo Candy: que Clara tal vez haya hablado con alguien. Gero encara a Clara para que le confiese la verdad pero ella asegura que no dijo nada de él y terminan peleados. Más tarde, las nenas escuchan a Benja y a los chiquitos que todo fue un plan de Gero para hacer caer a Clara. Clara se enfada y encara a Gero, desafiante.
Victoria y Guillermo llevan a Luna y Alejo a ver el regalo de boda: una enorme casa. A Luna le parece demasiado pero entre todos la convencen de que está bien. Juan los sigue, como si fuera un detective, y toma fotografías a escondidas. Después de ver la casa, Luna descubre a Juan y le pregunta qué está haciendo ahí.
Miranda se molesta porque Serena llama por teléfono a Toto, se siente celosa otra vez.
Más tarde, le regala a Toto una netbook. Por su parte, Juan le da una netbook igual a Pedro para que vaya cargando en ella todos los movimientos de Miranda. Pedro esconde un micrófono en el cuarto de Miranda y se lleva por confusión la netbook de Toto. Más tarde se da cuenta de que esa no es su netbook e intenta recuperarla antes de que los chicos se den cuenta. Cuando está a punto de hacerlo, es descubierto por Miranda.
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