Martín ve a Luz y Ulises dándose un beso en el ensayo de la comedia y le cae mal. No puede desahogarse, ni siquiera con Lisandro. Ulises, cada vez más ilusionado creyendo que Luz es libre, la invita al cine. Cuando están por salir, Martín los ve y expresa su decepción con Luz.
Diego habla con Victoria para que aleje a Felipe del colegio y si esto no pudiera ser, propone a Lucila irse juntos. Lucila, cada vez más angustiada, pide a Luz que diga lo que sabe; pero ésta, ya está harta, porque la vez que habló les fue mal a todos, no quiere hacerlo. Lucila decide entonces enfrentar la situación y dice a Diego y Felipe que está dispuesta a decirles toda la verdad
Rita rescata a Olivia justo antes de que empiece la desinfección… el humo no la alcanza, sin embargo, escucha que esto hubiera podido afectarla y a partir de ahí simula estar grave para que todos los chicos la atiendan a cuerpo de reina. Los chicos, asustados, lo hacen. Pero cuando sospechan que puede estar mintiendo, le hacen una trampa y escuchan cuando habla con su madre por teléfono contándole lo que les hace a los amigos. Ellos se le presentan dejándole en claro que la descubrieron.
El viaje a Brasil se ve postergado aunque Juan les escribe que está bien y esperando la resolución del juez. Todo porque entra en acción el tutor legal de Toto, José Hidalgo, dueño de la empresa fumigadora. Toto cuenta su historia: era un hombre malo que lo hacía trabajar y no le permitía ir a la escuela. Cuando tenía 7 años, se escapó con ayuda de Hueso y fue a parar al barrio donde conoció a Guillermo y Luna. Toto está muy angustiado porque ahora José lo encontró. Victoria, Guillermo, Alejo, Luna y Miranda se proponen defenderlo contra viento y marea. Pero José vuelve acompañado de un abogado que trae los papeles de la adopción legal de Toto, donde consta que tiene que estar al “cuidado” de José hasta su mayoría de edad. José está absolutamente decidido a llevárselo.
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